jueves, 13 de junio de 2013

Hacia un rediseño urbanístico de nuestros pensamientos




          Nuestro cerebro es el órgano encargado de almacenar, generar y desarrollar nuestros pensamientos. No sólo nuestra conciencia sino también un sinfín de actividades inconscientes y automáticas regulatorias de nuestro organismo e incluso respuestas automáticas que por su rapidez ni siquiera llegan a ser conscientes. Muchas veces nuestros pensamientos nos son impuestos. Toda reacción consciente a un estímulo externo es por definición algo impuesto por el afuera. Pero cualquier persona que haya intentado meditar aunque sea sólo un poco comprende lo difícil que es poner la mente en blanco. También el hecho que nuestros pensamientos "se aparecen" y afloran a la conciencia muchas veces sin un orden o sentido predeterminado y por supuesto sin volición alguna.
Por lo tanto es interesante pensar al cerebro y a sus conexiones neuronales como un animal a adiestrar, un caballo al que se debe domar de forma tal que mejore su rendimiento por lo menos en términos de creatividad y concentración.
Otra analogía, que es la que da título a este humilde escrito, es la de planificar o urbanizar una ciudad como si fuéramos un alcalde con recursos casi infinitos. Cuando uno viaja de noche en un avión y se sobrevuela una gran ciudad se ven las luces que iluminan las avenidas y calles de la misma. Las avenidas principales están más iluminadas, luego las calles más transitadas y cada vez menos luz en las arterias secundarias hasta aparecer grandes cuadrados de oscuridad en parques o manzanas muy poco transitadas.


Nuestro cerebro es asimilable a esta imagen. Los pensamientos más comunes son las arterias más iluminadas y las zonas oscuras son las redes neuronales que nunca usamos pero podríamos. Pero al igual que en una ciudad real el tránsito, o mejor  dicho el discurso mental tiende fuertemente a ir por zonas previamente conocidas y por lo tanto iluminadas.

Incorpore toda la red urbana
Doble por calles que nunca había tomado antes. Elija siempre rutas alternativas para cualquier destino, aunque parezcan mucho más largas. Incorpore el azar como fuente de decisiones, es decir vagabundee sin rumbo prefijado por las calles de su ciudad.
En términos de pensamientos esta premisa podría expresarse como usar la imaginación. Visualice cosas dispares uniendo situaciones, objetos o personas totalmente disímiles. Imagine situaciones disparatadas y trate de encontrarles una razón y una lógica. Si bien esta propuesta se parece peligrosamente a los manuales de autoayuda de creatividad para empresarios; contiene algunos conceptos interesantes.

Incremente la red tránsito público
El subterráneo de Sao Paulo es bastante limitado, como red es deficiente y no posee demasiadas líneas para cubrir la superficie de la megalópolis. El subte de Buenos Aires en cambio es más extenso pero su red es totalmente estrellada hacia el microcentro de la ciudad por lo que termina siendo también deficiente.  El subte de París posee una extensión considerable y una estructura meticulosamente reticulada lo que le permite llegar a todos los puntos de la ciudad.


¿Cómo se genera una red amplia en el cerebro? Aprenda otro idioma, si es posible bien distinto de los que ya conoce. Si habla idiomas romances aprenda uno anglosajón o escandinavo. Atrévase a aprender rudimentos de chino, mal no le va a venir en un futuro cercano. Estudie matemáticas o física, disciplinas con el más alto nivel de abstracción. Aprenda a tocar un instrumento musical de adulto o en su defecto a leer música. Lea mucha pero mucha poesía.
A medida que se dedica a estas nuevas actividades verá como se reconecta el cableado de sus neuronas y se tienden interconexiones nuevas y más ramificadas.

Evite y erradique los barrios de narcotraficantes
Dentro de la sináptica cerebral los neuropéptidos juegan un papel sumamente importante. Son pequeñas moléculas parecidas a las proteínas que se originan por transducción sináptica cerebral. Remito a manuales de introducción a las neurociencias a aquellos interesados, sobre todo al libro de Diego Golombek, "Cavernas y Palacios"

Dichas sustancias químicas son generadas por determinadas emociones o estados mentales vinculados a pensamientos. Las neuronas parecen tener conductas adictivas a determinados neuropéptidos lo que les lleva a desarrollar y profundizar determinadas emociones o pensamientos de forma recurrente. ¿Tal vez haya una razón química para los trastornos obsesivo-compulsivos?
De cualquier manera tiendo a pensar que los sentimientos o pensamientos de índole agresiva, territorial o que conllevan algún tipo de violencia, no sólo remiten a la parte más antigua de nuestro cerebro, el cerebro de reptil según Carl Sagan; sino que también inducen a las sinapsis neuronales a un estado total de droga dependencia. 
Erradique todo tipo de pensamiento violento, agresivo o con cualquier connotación de peligro salvo casos plenamente justificados por un estímulo externo. De lo contrario los barrios de narcotraficantes se instalarán por todos los barrios de su ciudad cerebral y sus neuronas se comportarán como chabones embrutecidos con síndrome de abstinencia de paco y sólo pensarán cosas como “pedazo de hijo te puta, te voy a cagar a trompadas” sólo porque alguien lo empujó un poco en el subte.
Las ideologías políticas, religiosas o de pertenencia a cualquier grupo, como por ejemplo un club de fútbol; podrían verse también como adicciones neuronales.
Creo que es altamente probable que las neuronas sean más adictas a pensamientos o formaciones reticulares neuronales de pensamientos negativos que de pensamientos positivos.
Además el cerebro tiende siempre a formar una determinada configuración neuronal, no puede quedarse quieto. Tal vez por eso sea tan difícil la meditación, o poner la mente totalmente en blanco.

Sea una aldea hippie dentro de un país fascista
Podemos luchar por mantener nuestras ciudades / mentes limpias pero el entorno, la nación externa que contiene nuestra ciudad puede ser muy enfermiza.
Existen enfermedades mentales de individuos pero también existen las enfermedades mentales de las sociedades, empresas, colegios o familias. Además creo que la inmensa mayoría de las estructuras mentales externas e impuestas por la fuerza, como la política o la religión también son formas meméticas altamente psicóticas. 


Manténgase a parte. El entorno enfermizo influye y mucho, copa las avenidas, lo obsesiona y lo termina contagiando. Elabore un mundo interno lo suficientemente fuerte como para resistir esa invasión. En otras palabras cultive su propio jardín y no trabaje en los parques de otros o peor aún mire como trabajan.

La ley de la calle
Como alcalde de su ciudad cerebro, viaje de incógnito y tenga contacto con el pueblo. En términos cerebrales significa hágale caso a su inconsciente. También a sus corazonadas o intuiciones, no hasta el punto de desarrollar un chamanismo inconducente pero téngalas en cuenta por lo menos.
Su cerebro, además no es sólo su estado de vigilia. Déle mucha pero mucha importancia a sus pensamientos cuando está recién levantado, medio dormido o a punto de entrar en sueño. Fomente la ensoñación durante su vigilia como fuente de inspiración e ideas nuevas. Por último recuerde y si quiere, anote sus sueños.



4 comentarios:

Ricardo Javier dijo...

Hola Julian. Acabo de notar que volviste a escribir en este medio. Pero antes de detenerme a leer con atención tus intervenciones, quería darte la bienvenida.

Ricardo Javier dijo...

ahora sí, el primero leído. Y a tiempo porque se me estaba apagando la farola del cerebro.
permitime hacerte un comentario: en un momento hablas de "el cerebro tiende siempre a formar una determinada configuración neuronal", pienso que seguramente el cerebro actúa de esa forma para poder concentrar su energía en otra; osea va automatizándonos para poder ser mas eficientes. Yo creo que no hay que luchar contra eso, solo hay que ser consientes de que periódicamente tenemos que hacer un revisionismo de nuestras actitudes y saber que son totalmente relativas, cuestionables y falseables.

Nemo dijo...

Gran entrada, grandes consejos.
Acabo de dar con tu blog aleatoriamente y me han entretenido mucho tus entradas, estás muy bien documentadas y redactadas.

Enhorabuena!

Saludos.

Anónimo dijo...

Hola¡¡¡¡ Estás leyendo a Facundo Manes?. Ahora es moda. Seguro que no, vos no sos de la manada. Recordás un trabajo de Antonio Gasalla que se disfrazaba de Dendrita? Es un creativo como vos. Felicitaciones. Chau artista.