jueves, 31 de julio de 2008

Músicas extremas

Una pregunta que hago a mis amigos y conocidos últimamente. Cuál es la música más triste que conocés ? Y la más alegre ?
Las respuestas son pocas, en general, aún mis amigos músicos suelen titubear al contestar.
Una triste muy repetida es el Adagio que no es de Albinoni, pero también se repiten algunas canciones en las que inevitablemente la letra juega su parte.
Una primera respuesta, podría ser, para mí; la siguiente.

La música más triste, "Les Pleurs" de Monsieur de Sainte Colombe para viola da gamba sola, por Jordi Savall. Una escena de la película "Tous les matins du monde", donde el músico viudo añora a su mujer muerta y cree verla al tocar. O realmente algo o alguien lo visita ?



La música más alegre, la Obertura de "Le Nozze di Figaro" de Wolfgang Amadeus Mozart, en versión de Neville Marriner y The Academy of St Martin in the fields. Alguien alguna vez la describió como una explosión de burbujas de colores.

Y para ustedes, cuáles son las músicas más tristes y más alegres que conocen ?

miércoles, 30 de julio de 2008

El baile del caño.

Quiero opinar algo sobre un tema frívolo como lo es la moda actual en la televisión argentina.
Hace algún tiempo, leí la primer novela del controversial escritor francés, Michel Houllebecq, llamada "Ampliación del campo de batalla".
En ella se exponía la teoría de que la vida sexual de las personas tenía una desigualdad de oportunidades y resultados aún más injusto que la riqueza monetaria. Hay alguna gente que por genética y un poco de astucia tiene un "desempeño" muchísimo mayor que el de cualquier mortal. En otras palabras una vida sexual mucho más variada y en mayor cantidad que el resto.
Estoy seguro que "Pampita" por poner un ejemplo, si quisiera podría elegir de entre casi infinitos partenaires sexuales, cosa que una mujer común, como la mía, como la de casi todos; no.
Entonces se construye una sociedad en la que se premia esa aleatoria distribución de belleza, fortaleciendo un canon que como todos es arbitrario.
Y se vende dicha belleza como producto enfatizando siempre el costado sexual y casi explícito de la imagen. Sirve para publicitar casi todo, desde autos hasta computadoras.

A mí por ejemplo me encanta la actriz Kate Winslet que no es precisamente sexy y a muchos "jurados de la nada" les parecería una gordita inglesa insulsa.
Pero cuando en programas como los actuales se muestra pornográficamente la sexualidad de cuerpos trabajados a la perfección (unidos generalmente a cerebros un tanto descuidados); existe algo de ostentación perversa.
Como bien apunta Houllebecq, el sexo es un un gran factor de desigualdad que encima es acentuado por la edad y nuestra obsesión cultural con la juventud.
El mundo audiovisual impuesto me lleva a considerar sexualmente muy deseable a un a mujer de 20 años que sea atractiva pero como yo tengo 45, mi única posibilidad es a través de la siniestra manipulación del dinero. Crecer implica aceptar lo que nunca tendrás y dejarlo de lado elegantemente. No sólo ya no remontaré el Ganges ni descubriré la vacuna del cáncer sino que jamás tendré sexo con Naomi Campbell.
Entonces vender voyeurismo de alto contenido erótico a millones de personas que nunca podrán acceder ni por asomo a poseer cuerpos de ese nivel de refinamiento, tiene algo de intrínsecamente perverso. Fomenta la insatisfacción en los niveles más primarios.
Recuerdo la publicidad del jabón Dove "belleza real" o algo así que mostraba mujeres normales, incluso con arrugas y celulitis pero que terminaban siendo infinitamente más seductoras por su realidad. Lo que los yanquis llaman burdamente "girl next door".
Pero la gran mayoría me temo que no lo ve y millones de televidentes se siguen calentando con obscenidades inalcanzables en vez de pensar y trabajar por lo alcanzable.
Que debiera ser una caricia de amor a la mujer que elegiste, una canción afinada con ganas, un mueble bien lustrado o un libro muy disfrutado.
Y no el torneado y hermoso culo de Pampita.

martes, 29 de julio de 2008

Viento de Invierno

Blow, blow, thou winter wind,
Thou art not so unkind
As man's ingratitude;
Thy tooth is not so keen
Because thou art not seen,
Although thy breath be rude.
Heigh-ho! sing heigh-ho! unto the green holly:
Most friendship is feigning, most loving mere folly:
Then, heigh-ho! the holly!
This life is most jolly.

Freeze, freeze, thou bitter sky,
Thou dost not bite so nigh
As benefits forgot:
Though thou the waters warp,
Thy sting is not so sharp
As friend remember'd not.
Heigh-ho! sing heigh-ho! unto the green holly:
Most friendship is feigning, most loving mere folly:
Then, heigh-ho! the holly!
This life is most jolly.

William Shakespeare

Omar el tendero

"Hay que recuperar en la taberna el tiempo perdido en la mezquita", La frase es de Omar Khayyám (muerto en 1123) , que en persa significa tendero. Un personaje singular que pudo reunir la astronomía, la mística, la matemática y la poesía.

Como astrónomo, Khayyám calculó la duración del año solar como de 365,24219858156 días, correcto en los seis primeros decimales. Esta medida de calendario tiene sólo un error de una hora cada 5.000 años mientras que el calendario gregoriano, en uso actualmente, tiene un error similar cada 3.330 años !

Como matemático, inventó el método de resolver ecuaciones cúbicas intersecando una parábola con un círculo. En el año 1070 escribió un tratado de Álgebra donde clasificó las ecuaciones según su grado y dio reglas para resolver ecuaciones cuadráticas muy similares a las actuales.

Es visto por algunos como un gran maestro sufí que utilizó la poesía para ejemplificar su visión mística. Como poeta, es famoso por sus cuartetos, Roba'iyat en plural, libro que fuera traducido por Edward Fitzgerald a fines del siglo XIX brindándole una fama inusual en Occidente.

Sus poemas siempre me fascinaron. Hace diez años desembarqué en Barcelona, decidido a vivir en Europa con una copia en castellano de las Roba'iyat. Al llegar a París, me compré otra copia del libro esta vez en francés y torpemente las volví a leer.



Pero semanas después una noche en Frankfurt me encontré en una mesa con varios estudiantes muchos de los cuales no hablaban ni siquiera inglés. Quiso el destino que me sentara al lado de una expresiva mujer con ojos como avellanas. Pudimos conversar mitad en italiano, mitad en inglés. Era iraní. En unos instantes le mostré mi copia francesa del libro de Khayyám, que resultó ser su poeta favorito y según su versión el poeta nacional.

Ante mi completo asombro,ella comenzó a recitar en persa las Roba'i, hechizándome con una musicalidad extraña y perturbadora.

Tal vez mi viaje haya sido sólo un acercamiento al Roba'iyat donde fui perdiendo significado con cada idioma y ganando musicalidad.
Un ruba'i.

Mi pregunta


Oh, pobrecita alma mía ! Si el llorar y el disolverte hasta la sangre y la muerte es tu oscura condena; si el amanecer de cada día es una nueva tortura; dime alma tu pensamiento: qué has venido a hacer aquí si no has de vivir en mí, mas que el lapso de un momento ?

jueves, 24 de julio de 2008

La estética de la Aduana

"Pájaro en el espacio" es una serie de esculturas realizadas por el escultor rumano Constantin Brancusi. La obra original fue realizada en 1923. Siete de las esculturas en la serie están realizadas en mármol y otras nueve fueron fundidas a bronce. Una obra de la serie fue vendida en 2005 por veintisiete millones y medio de dólares, un récord para esculturas en subastas.

En la obra, Brancusi se concentró no en los atributos físicos de un pájaro, sino en su movimiento. Como resultado, las alas y plumas del pájaro fueron eliminadas, su cuerpo muy elongado y su cabeza y cola reducidas a un plano oval.


En 1927 Brancusi vendió una obra de la serie a un coleccionista norteamericano pero tuvo que pagar cuatro mil dólares por derecho aduanero para ingresar la obra a los Estados Unidos.
Las obras de arte no pagan impuestos aduaneros, son "duty free". Pero el pájaro de Brancusi no tenía cabeza, ni alas, ni plumas.... Era una forma de bronce que se elevaba de su pedestal como una llama o peor aún como un avión.

El inspector de Aduanas Kracke dijo que no era arte, sino solamente "una manufactura de metal ... gravable en un 40% de impuestos". La prensa se hizo eco, indignada. El escultor apeló a la Corte Aduanera. Semanas después Brancusi ganó el caso. En su decisión la corte definió dogmáticamente "es una obra de arte por su perfil simétrico, diseño artístico y belleza de acabado". Aún el más primitivo de los lógicos rechazaría una definición que repite el sujeto en su definición (arte - artístico) pero Constantin obtuvo su dinero de vuelta.

Jaque al arte

Marcel Duchamp, una figura que arroja a la vez luz y sombras en el arte moderno. Una evolución artística original que podemos imaginarnos como una partida de ajedrez que Duchamp jugó a lo largo de su vida con su espíritu ? con su demonio interior?
Intentaremos aquí buscar algunas jugadas claves de dicha partida.
Una progenie de artistas, un hermano y una hermana pintores y un hermano escultor, a los que Marcel según algunos, envidió toda su vida por considerarlos mejores artistas.
En 1912 pinta el "Desnudo descendiendo una escalera nro 2" reuniendo en un solo lienzo futurismo y cubismo. Duchamp envía la pieza al cubista Salon des Indépendants, pero el jurado Albert Gleizes pide a los hermanos del pintor que voluntariamente retire la pieza o por lo menos que repinte el nombre y lo cambie. Los hermanos de Duchamp hablan
con él quien mansamente se niega. Más tarde, Duchamp se refiere al episodio, "no les dije
nada a mis hermanos, pero fui inmediatamente a la exposición y me llevé la pintura a mi casa en un taxi. Fue realmente un punto de inflexión en mi vida, puedo asegurarlo. Comprendí que no iba a interesarme mucho más en grupos luego de esto".
Tal vez en ese momento empieza su solitario y raro camino.
Por esa época Duchamp lee "El uno y su propiedad" de Max Stirner. Este libro es para él otro punto de inflexión en su desarrollo intelectual y artístico. Lo llamó " un libro extraordinario.... que no postula teorías formales, pero reitera que el ego está siempre en todo".
La novela de Raymond Roussel Impressions d'Afrique fue para algunos otra influencia fundamental en él. Se retira de los ambientes artísticos y estudia física y matemáticas mientras trabaja como bibliotecario. Se fascina con Henri Poincaré , quien postulaba que ninguna teoría podía ser considerada "verdad".
"Las cosas en sí mismas no son lo que la ciencia puede alcanzar .....sólo las relaciones entre las cosas. Fuera de estas relaciones no existe una realidad cognoscible" escribió Poincaré en 1902.

En 1917, ya en EEUU, Duchamp expone la famosa "Fountain" que fuera rechazada por el comité de la "Sociedad de Artistas Independientes". Su gesto es considerado actualmente como el germen de buena parte del arte contemporáneo, ya que por vez primera tal vez, el arte no ya un producto, sino una mirada. Ya no importa tanto el resultado final, ni su factura, ni la técnica; el artista es alguien que arroja simplemente una mirada distinta sobre una realidad inasible. Cada época busca en el pasado, a posteriori a sus padres fundadores que validan su "zeitgeist". Esta maniobra autovalidante puede ser una estafa o una construcción intencionada de un canon cultural; pero es innegable que Marcel Duchamp fue el candidato perfecto para justificar la segunda mitad del siglo XX y lo que va del XXI y llamamos arte contemporáneo.
Luego vino "El Gran Vidrio", los Readymades, Rose Sélavy y otras cosas que todos conocemos.
En 1918 Duchamp desaparece en Buenos Aires nueve meses aparentemente dedicado sólo al
ajedrez. Talla las piezas de un juego de ajedrez, salvo los caballos, realizados por un ebanistero local. Uno de sus readymade, llamado "Trebuchet" (trampa) es en realidad una posición de ajedrez muy particular en la que el que mueve, pierde. La inacción es pues el triunfo.
En sus propias palabras "..soy todavía una víctima del ajedrez. Tiene toda la belleza del arte y mucho más. No puede ser comercializado. El ajedrez es mucho más puro que el arte en su posición social".

Cuando años más tarde Duchamp realiza unas valijas con reproducciones pequeñas de algunas de
sus obras, tiene grandes problemas para reproducir en escala el "Gran Vidrio". Esta pieza se había roto en una exposición y el artista decidió que la fractura del vidrio mejoraba la obra. El problema fue reproducir exactamente la fractura en las copias.

El último movimiento de la partida es el romance secreto y apasionado con la escultora brasileña María Martins que aparentemente inspiró su última obra, "Etant Donnés", un elaborado “peepshow” de un desnudo femenino hecho en yeso y piel de cerdo con referencias al sexo pero también al distanciamiento emocional. Trabajó casi en secreto en la pieza por más de veinte años, cuando todos pensaban que sólo le interesaba el ajedrez.
Duchamp muere en 1968 y su epitafio reza "D'ailleurs, c'est toujours les autres qui meurent" (Además, siempre son los otros los que mueren).

Porqué nos fascina Duchamp ? Será porque todo en él es misterioso ?
El amor romántico y su seducción están basados en el misterio y el desconocimiento. Cuando no conocemos mucho a la persona de la que nos enamoramos, tendemos a rellenar los espacios oscuros con proyecciones muy positivas. Así funciona en gran medida la seducción. Cuando en la vida amorosa se llega a la etapa de la convivencia, las áreas desconocidas son cada vez menos y ya no se puede rellenar como antes. Aparece la realidad cotidiana en toda su fealdad y es cuando el amor se pone verdaderamente a prueba, mucho más que con el sexo. Duchamp para nosotros funciona retrospectivamente así. Lo rellenamos positivamente porque nunca podremos convivir con él. Ni siquiera María Martins pudo.

Hace ya muchos años, el hermano de una pareja mía era un ajedrecista de renombre y le cometé
del retiro ajedrecístico de Duchamp en Buenos Aires. Unas noches después, en un bar en el bajo, mi ex cuñado me presentó a un viejecito que toda su vida frecuentó el Club Argentino de Ajedrez de la calle Paraguay y recordaba a un francés gélido y callado que jugaba muy bien pero no hablaba con nadie.
Le pregunté si alguna vez había jugado contra él.

"No me atreví" - respondió con una sonrisa.

miércoles, 23 de julio de 2008

El que hablaba con los pájaros

La música llamada clásica es también llamada música de tradición escrita o como dice un amigo mío, folclore histórico europeo. Pero en el Nuevo Mundo surgió, con el siglo XX, una música folclórica nueva, el jazz. No sólo requiere de una destreza técnica comparable a la clásica sino que en mucho menos tiempo ha cubierto un territorio musical comparable. Su énfasis en la improvisación recuerda épocas perdidas de la música renacentista y del temprano barroco que fueron sepultadas por la notación escrita.
Pero también a veces siento que el jazz es un tipo de música infinitamente más divertida de tocar que de escuchar.
Eric Dolphy es un jazzman no muy conocido. Cuenta la leyenda que aprendió a tocar la flauta traversa escuchando a los pájaros de su jardín y queriendo comunicarse con ellos.
Revalorizó un instrumento maravilloso, el clarinete bajo y en su corta vida nos dejó un legado inmenso.
Eric era vegetariano, abstemio y no consumía drogas a pesar de tocar habitualmente con consumidores "pesados" como John Coltrane. Su expectativa de vida era supuestamente mucho mayor que la de sus colegas. Pero era diabético y la muerte nos lo sustrajo en la noche del 29 de Junio de 1964. Acababa de llegar a Berlín, Alemania. Estaba en Europa con el sexteto de su amigo Charlie Mingus y planeaba radicarse en Francia con su novia bailarina, Joyce Mordecai.
Según algunas versiones fue encontrado inconsciente en su cuarto de hotel en un coma diabético. Para algunos no conocía su condición de diabético y se habría atracado con avellanas y miel. Según otras versiones habría colapsado en el escenario. De cualquier manera fue llevado al hospital, pero se cuenta que los médicos no tenían idea de su condición de diabético y al pensar que era un caso de sobredosis lo dejaron sin atender por horas. Otra versión postula que la insulina en uso en Alemania era mucho más fuerte que la estadounidense y le provocó un shock insulínico. Para su amigo Mingus fue un complot de la CIA para eliminarlo.
De cualquier manera la muerte estaba decidida a llevárselo, tal vez celosa porque hablaba con los pájaros.

Escuchémoslo en un solo de clarinete bajo.



Y luego con su grupo en un impresionante y aéreo solo de saxo.

lunes, 21 de julio de 2008

Suite de suites

Las seis suites de Bach para violoncello solo. Otro cosmos minimal que se despliega de a poco.
Hace mucho leí en una revista de música un reportaje al chelista Mischa Maisky que contaba que su hermano mayor le regaló la partitura de las suites y le djo que tenía toda la vida para aprender a tocarlas.
Para la época las suites son revolucionarias. El cello era un instrumento poco usado fuera de Italia como instrumento solista y la suite instrumental de danzas era patrimonio exclusivo de la viola da gamba en países como Francia y Alemania. Uno de los músicos a los que Bach más estudió, Buxtehude, escribió varias sonatas para violín y viola da gamba y no para violín y cello.
Las suites para cello poseen una forma prestada de la literatura de otro instrumento que ya empezaba a ser crepuscular y alumbran magistralmente el amanecer del violoncello.
Algunos violagambistas sin embargo han reclamado las suites para sí y las tocan transcriptas con un resultado distinto pero muy satisfactorio.

En la época una suite de danzas muy comúnmente podía tener seis movimientos; un preludio, una alemande seguida de una courante; luego una melancólica sarabande, un menuet o gavotte y por último una veloz gigue.
Pero Bach compuso seis suites de sies movimientos cada una. Para una persona tan de su época; obsesionada con toda clase de simbolismos, como Bach, eso nos debería llamar la atención.
A lo mejor la idea del autor es que las seis suites en conjunto sean a su vez una mega suite, donde la primera oficia de preludio, la segunda de alemande y así.
Cabría realizar el análisis, yo no lo hice; de ver si cada suite se corresponde en carácter con el habitual de cada movimiento.
Vaya pues, el preludio del preludio en versión de Mischa Maisky.

El loco

Acabo de leer un libro de Alejandro Jodorowsky. El nombre lo conocí por primera vez en mi adolescencia como guionista del genial ilustrador de historietas francés Moebius. Pero desde hace unos años he conocido al Jodorowsky completo y estoy absolutamente intrigado y fascinado con él. Recomiendo fervientemente su autobiografía, que debe ser leída sin prejuicios.
Desde siempre tuve una claro rechazo por los textos de autoayuda. Para mi formación en "ciencias duras", son en general un conjunto de charlatanes bien intencionados en el mejor de los casos y otro grupo de estafadores en su mayoría. Recuerden a Osho y a su colección de Rolls Royces.
Pero Jodorowsky es en principio un artista, mimo, actor, dramaturgo y director de cine surrealista que creó algo llamado psicomagia que merece una entrada por sí misma. O es un gran literato y embauca con mucha clase o es un chamán en serio como quería Joseph Beuys y creo que quiero yo.

Hacia el final del libro enumera siete leyes mágicas, que por coincidir mucho con mi visión del mundo transcribo aquí sin agregar explicación alguna. Esas explicaciones se las dejo al lector.

1.- El mundo no es eso que pensamos que es.
2.- Todos los sistemas son arbitrarios.
3.- Todo está conectado con todo.
4.- Todo es posible.
5.- "Ahora" es el momento de poder.
6.- Todo está vivo y puede responder.
7.- Siempre hay otra forma de hacer algo.

Spinozista hippie, no?

Uno mismo, en el viaje de la vida tiene que aprender a desdeñar las sirenas del poder, del dinero, de la fama, del sexo y tantas otras boludeces. Pero Jodorowsly también habla que en una parábola vital hay que desdeñar también cosas no tan obvias.
Cuando se es joven uno trata de competir y ganar. Ser un campeón. Hay que desdeñar al campeón que hay en uno.
Luego se abraza una causa y se trata de ser un héroe. Hay que desdeñar al héroe que hay en uno.
Ya maduro, llega el tiempo de dar frutos y se intenta ser un genio. Hay que desdeñar al genio que hay en uno.
Para Jodorowsky se llega entonces a ser un santo.
Pero yo agrego, hay que desdeñar al santo que hay en uno.

Qué queda entonces ? Qué es lo no desdeñable en uno ?
A Alejandro le gustaría la imagen metafórica que propongo.
Bajar en los arcanos del tarot hacia el cero.

La carta anterior a todas las numeraciones.

El loco...

viernes, 18 de julio de 2008

El final del camino

Tema difícil si los hay. Pero es algo que nos atañe a todos.
Todos habremos eventualmente de morir. Ese final absoluto para algunos o tránsito para otros necesita en casi todas las culturas actuales de varios rituales. Pero en algún momento en el tiempo, cuando tal vez recién éramos tribus de treinta o cuarenta personas que vivíamos de la caza del mamut; esos rituales todavía no existían.
No conozco rituales mortuorios de animales, admito mi total ignorancia en el tema. Creo que el animal humano en cierto momento reconoció y admitió la presencia de la muerte y su primer derivado, los cadáveres. Aparentemente el hombre de Neardenthal ya enterraba a sus muertos pero se preocupaba muy bien de poner una gran piedra sobre ellos.
Cuál es la relación con nuestros muertos ? Seguramente de afecto y respeto pero sus restos mortales son otra cosa.
Tal vez como los hombres primitivos tengamos miedo que los muertos regresen y es por eso que desarrollamos modernamente un tabú tan grande con la muerte.
Muy pocas culturas momificaron a sus ancestros y los conservaron con ellos. Los incas solían cenar con el abuelito momificado sentado a la mesa y un pueblo, creo de Indonesia, pone a sus cadáveres a la vista en la ladera de una montaña. Un raro ejemplo latinoamericano es el pueblo mexicano y su relación casi festiva con los muertos y la muerte pero constituye más una excepción que una regla.

Pero para el resto de nosotros la imagen de un cuerpo muerto y mas aún un cuerpo putrefacto es sinónimo de horror y una visión casi prohibida en nuestra cultura. El renacimiento con su idea de la vanidad del mundo y su obsesión con la melancolía fue la excepción mostrada en varias obras de arte. Pero desde aquella época hemos ido progresivamente ahuyentando la idea de la muerte y también su presencia.
Pero como dijo un epitafio anónimo español : "algo que nos iguala a todos no puede ser tan malo..."

El grabado es del mexicano José Guadalupe Posada.

viernes, 11 de julio de 2008

Un justo olvidado


En la noche del 23 al 24 de agosto del año 1572 se desató una matanza que pasó a la historia como Noche o la Matanza de San Bartolomé. Los hugonotes, protestantes franceses, atraídos a París por una boda real fueron asesinados en masa por la violenta facción católica lideradas por el duque de Guise, y la familia real.
El papa comisionó frescos en el Vaticano mostrando el genocidio, que eso fue; a Vasari, mejor biógrafo que pintor.
Queremos denotar en este blog los asesinatos de Claude Godimel, músico y Petrus Ramus, filósofo. También la espantosa semejanza de las guerras de religión francesas con la violencia de los años 60 y 70 en la Argentina, cuatrocientos años después con el mismo nivel de atrocidad y absurdidad.

Incluso el rey ordenó a los gobernadores de todas las provincias de Francia que asesinaran en masa a los hugonotes locales.
Según el historiador protestante de la época John Fox, sólo dos o tres gobernadores rehusaron obedecer las órdenes del rey. Uno de estos, llamado Montmorrin, gobernador de Auvernia, escribió al rey la siguiente carta que merece ser recordada como ejemplo
de objeción de conciencia.

»SEÑOR: He recibido una orden, con el sello de vuestra majestad,
de dar muerte a todos los protestantes en mi provincia.
Tengo demasiado respeto por vuestra majestad para no creer
que la carta sea un fraude; pero si la orden (Dios no lo quiera)
fuera genuina, tengo demasiado respeto por vuestra majestad
para obedeceria.»


Vaya nuestro recuerdo a un justo entre los justos.

Marx y las multitudes


A pesar de la putrefacción del marxismo leninismo soviético, se insiste en muchos lados en hablar de Karl Marx. Generalmente mal, por supuesto. A raíz de la desaparición del modelo bipolar de la posguerra, se impuso un modelo de capitalismo globalizado. Si bien la información circula como nunca antes también circula la desinformación. Y la globalización pareciera ser un proyecto a gran escala de semiesclavizar a algunos países y estupidizar a otros para producir en forma muy barata productos en los primeros para vender a los segundos. Y de paso amurallar cada vez más la brecha y arrasar con cualquier localismo. El inglés de negocios vale más que el bretón o el occitane y la hamburguesa de locales de nombre escocés más que cualquier foie gras. Es mucho más fácilmente vendible.

Pero volviendo a Marx. Una cosa es Marx y su pensamiento y otra el marxismo y sus mutaciones. Casi casi como el Sermón de la Montaña y el papado.
Karl Marx es un filósofo importantísimo en la historia del pensamiento y sólo se lo puede entender si leemos antes a Kant y Hegel, pero también a Max Stirner y Pierre Joseph Proudhon. Negar su valía como pensador es pecar de ignorante, sobre todo viniendo de gente que piensa que Adam Smith o más modernamente Ayn Rand son filósofos de fuste. Smith o Ricardo son notas al pie en la historia de la filosofía al lado no ya de un Hegel, sino de un Schopenhauer o un Berkeley. Y la señora Rand ni siquiera merece el apelativo.
Pero lo que me molesta y mucho del pensamiento de Marx es su teleología. Que es exactamente lo mismo que me disgusta del cristianismo. Las dos son religiones de salvación. A través de la iglesia o de la dictadura del proletariado, pero las dos predican la venida de un Paraíso que está en el futuro.
No existen los paraísos a futuro. Suelen ser una excelente excusa para disimular infiernos en presente.


Cuando los hombres se juntan para construir un paraíso, les suele salir un infierno.
El problema claro, está en que es mucho pero mucho más fácil creer en lo colectivo, que además es siempre más fuerte; que en lo individual.
Señores, los paraísos son individuales y en tiempo presente y cada hombre debe contribuir con su poca o mucha luz a iluminar la oscuridad del mundo.
Aunque sea muy fugazmente.

jueves, 3 de julio de 2008

Variaciones Goldberg


Las Variaciones Goldberg, originalmente Aria con variaciones diversas para clave con dos manuales, (Aria mit verschiedenen Veraenderungen vors Clavicembal mit 2 Manualen), es una obra que todo el mundo debería escuchar al menos una vez en su vida.
No voy a contar aquí la famosa historia del insomnio y el pedido del alumno de Bach, Johann Gottfrieb Goldberg . Para los interesados, los remito al artículo correspondiente que lo explica mejor que yo. Artículo Variaciones Goldberg de Wikipedia
La forma musical de variaciones, que puede ser sobre una melodía o como en el caso de las Golberg, un bajo; es una forma sumamente restrictiva. Se deben mantener la armonía y su correspondiente pulso armónico durante todas las variaciones. Variaciones que por otro lado se supone deben ser contrastantes y variadas.
Existen mucho ejemplos, Beethoven, Brahms entre otros, pero las Goldberg son para mí uno de los ejemplos más acabados. Cuando las escucho siento que se despliega lenta y parsimoniosamente ante mí toda la variedad del mundo. Todas las formas, colores y perfumes se abren lentamente como una flor sinestésica a medida que las variaciones se van sucediendo.
Pero también podríamos pensar a las Variaciones Golberg, arquetipo de variaciones, como la descripción musical de una parábola vital.
La genialidad poética de Bach consiste en pedir al final de las Variaciones la repetición de la sencilla Aria inicial, germen de toda la obra. Aria da capo. El retorno del aria añade simetría a la obra, posiblemente incluso insinuando un aspecto de naturaleza cíclica en la obra - un viaje circular.
Cuando la escuchamos por primera vez, no podemos intuir todas las formas y contrapuntos contenidos en ella; pero en el Aria da Capo ya resulta nos imposible escucharla igual.
Cómo lo mismo, nota por nota idéntica a la inicial; no puede jamás escucharse de la misma forma.
Para algunos una idea nostágica, para otros una recapitulación o un marco de simetría.

La realidad en su sentido profundo, nunca es lineal, sino que es una infinita espiral ascendente. Que puede visitar y revisitar siempre los mismos lugares al ascender o descender. Acaso la obra de muchos artistas no es una constante cita a las mismas obsesiones durante toda una vida ? Acaso a nosotros mismos no nos desvelan las mismas cosas tal vez desde la niñez? Pero si existe algo así como la madurez y la experiencia, esta sería revisitar los mismos lugares fundacionales o traumáticos, con miradas y comprensiones distintas o hasta mejores cada vez.

Si toda la filosofía es un aprender a morir en paz consigo mismo; después de todas las variaciones de una vida, sólo resta repetir el principio con la sencillez con que toca Glenn Gould. Volver a la alegría de la infancia en el final.

Aria, da capo.


La décimo segunda maravilla del Imperio

El nacimiento de mi hijito Lorenzo fue un acontecimiento axial en mi vida. Una perogrullada dirán y con razón.

Me cuesta poner, sin embargo en palabras las sensaciones que me embargan cuando lo cargo dormido a la noche o cuando me mira y sin motivo aparente se ríe con todo su cuerpo.

Es en estas situaciones cuando uno recurre a otros lenguajes como la música. O la poesía.

De una autor chino anónimo de la Dinastía Tang en traducción de F. Toussaint y A. Batistessa.

La Peregrinación Inútil.
Los viajeros exhaltan la belleza de una tarde de nieve en Houa-Chan, la música de la campana del crepúsculo en el monasterio de U-Tchien, el color del cielo de Tsou-Kiang, el encanto de una noche de lluvia en en Wao-Tai.

Yo no iré a Houa-Chan, porque el cuerpo de mi hijito es bermejo como la nieve en el ocaso, ni a U-Tchien, porque su voz es más emocionante que la campana del monasterio, ni a Tsou-Kiang, porque todo el cielo lavado por la brisa se refleja en su mirada.

Pero tal vez iré a Wao-Tai, para evocar una noche de lluvia en que una mujer concibió un niño que es para mí la décimo segunda maravilla del Imperio.